Soy gauchitO

Cuando estoy feliz y encima en pedo puedo hacer cosas increibles como terminar a los arrumacos con alguien en un auto... Muchas podrán decir que esta situación es más que común, pero la escena me persigue: él y yo en una Renault Fuego colorada en Bulnes y Cordoba. No cualquiera pebete.

Y sobre todo...por qué quedarme en bolas y la necesidad de hacerme la sexy cuando mis piernas tienen abrigo propio?? Me refiero a una especie de polaina de pelos en cada pierna que llegaba desde el dedo gordo del pie hasta entrada la cadera. Le hací competencia a la propaganda de la Klosterboer con el grito de "que pelazo!"

No contenta con esta patética imagen, se sumaba mi afonía y mi tos que con el paso de las horas (y con el frío que chupaba en el Renó) me transformaba en una especie de Cacho Castaña después de una noche de reviente extrem.

Claramente al flaco no le importaron mis pelos ni mis gritos de "no da! soy Diego Armando, boludo" porque terminamos acomodándonos en la parte trasera de la Renoleta Fire...

En un efímero momento de lucidez, recordé que llevaba puesto esos prácticos dispositivos que usamos las mujeres cuando estamos en nuestros días. Prácticos para eso, pero claramente no recomendables para una noche de guerra. Tirarlo por la ventanilla no era una opción viable. Sacarlo y dejarlo en la guantera, menos. Ya para esta altura el momento de lucidez se había esfumado, así que le dí para adelante (no sin antes avisarle a él de mi situación... porque si algo soy en pedo, es ser sincera)

Si a él no le importó la mata de pelos que yo tenía encima, claramente tampoco le llevó el apunte a mi declaración... así que la escena transcurrió como si nada.

Finalmente un llamado desesperado de mi amiga fue la excusa perfecta para irme (todo muy lindo pero los efectos del alcohol ya se estaban yendo y mi cara estaba comenzando a mostrar signos de resaca) 

Previo intercambio de celulares, agarré mis cosas y salí del auto del amor a medio vestir.

Ya en casa de mi amiga, logicamente hablamos del tema. Tras mi relato y al grito de "perovosestasloooca!!!!... pero cómo haces eso, la pu"*ø·#$&@&@ Eso se te fue al útero!!!" caí en la cuenta que algo debía hacer.

Fui al baño.

Y ahi estaban...

No sólo esa suerte de diu caserito, sino un forro pegado en la suela de mi zapato cual trofeo de guerra.

Grassa yo??? Naaaaa