Me mude...o en eso estamos.


"¿Cuando te mudás?", es lo único que ultimamente me preguntan mis allegados.
"El problema es que la mudanza, es mi mudanza" intento explicarles, mientras me miran desorbitados y vuelven a la carga con un "pero decime, ¿cuándo te mudás finalmente?"

Que la mudanza se haya convertido en mi mudanza, implica que las cosas se hagan a mi manera. Esto significa que de repente todo transcurre fraccionada y cíclicamente hasta formar un lindo complejito: un día toca pintar, otro me toca limpiar, otro día ordenar, uno vuelvo a repasar lo que ya había limpiado y finalmente otro día vuelvo a ordenar lo ya claramente ordenado (es que las cantidades de cosas que caben en una casa es algo impensable chicos.)


El   sábado   fue   el   primer   día   que   me   quede   a   dormir.

Y me bastó un día, UN DIA para darme cuenta de una serie de cuestiones:

- Soy una pésima ama de casa que nada sabe de "organizarse, tener un plan de acción, para ahorrar tiempo y obtener excelentes resultados" Yo empiezo por lo que más me gusta, hasta que me duele la cintura y sigo con otra cosa. Resultado: todo afuera de las alacenas (salvo la ollita esa que me da asco tan solo verla), ocho mil trapos sucios y ninguno seco y limpio, cinco productos de limpieza a medio abrir, etc, etc, etc.

- Soy asquerosamente chusma (o estoy falta de vida social), si no no me explico el motivo por el cual dejo todo lo que estoy haciendo para ir a ver a mis vecinos que bajan en el ascensor.

- El hecho de negarme a usar guantes cuando limpio...es realmente una pelotudez. No hay crema que devuelva la elasticidad a mis manos.

- Necesito un televisor urgente.

- Soy una vieja chota que se va a dormir un sábado a las 10.30 mientras su joven vecina baila en tetas frente a su espejo y despues sale a romper la noche en escote y minifalda.

- Voy a necesitar comprarme cosas dulces para el bajón de las 3 a.m, porque comer copos de maiz tirada en la cama...es una imagen que prefiero olvidar.

- Voy a tener que comprarme otra marca de copos de maiz, porque darme cuenta que arriba del paquete dice en letras grandes la ciudad de mi último chongo... es una imagen que prefiero olvidar.

- Soy una verdadera cagona cuando escucho ruidos que no se de donde vienen. Pero puedo programar planes de emergencias excelentes.


- La necesidad agudiza el ingenio, es la única excusa valedera para justificar el por qué durante la noche me pongo a buscar un recibo de teléfono por todo el departamento, para averiguar cuál es mi número y pasarselo a mi amiga asi me habla.

- La cama de 2 plazas es contraproducente con mi ciclotímico estado de ánimo: soy felíz tirada ahí, pero me pongo de muy mal humor cuando me doy cuenta que estoy durmiendo doblada en un rincón. Sola.

Y por último, pero no menos importante: 

- Necesito un novio en la casa... De ser posible, que sea mío.

4 comentarios:

  1. Y la perra?, o te olvidaste ò tenes un capitulo aparte para ella.

    ResponderEliminar
  2. bueno, a ver...
    y el novio, cómo lo pensás?


    jeje

    Un abrazo.

    Nicous

    ResponderEliminar
  3. ando necesitando una novia.
    Pero no en mi cama, no.
    En mi vida también.

    Sinó no.

    Un abrazo

    ResponderEliminar